Saliendo de Griffin Fall...

Ha sido una larga semana, haciendo los preparativos para el largo viaje que tenemos por delante, atendiendo a sesiones con el Rey y sus concejales desde el alba hasta el ocaso. Mientras que, por su lado, Miruvore y Lorgar han recorrido la gran ciudad, andando por sus callejones y mercados hasta quien sabe que lugares oscuros hayan encontrado. Hemos salido hoy de Griffin Fall, ahora con rumbo al Oeste. Llevamos caballos, comida y agua que el Rey generosamente nos ha proporcionado. Sin embargo todavía no se disipa la niebla que cubre nuestra misión, y con cada respuesta surgen nuevas preguntas.

Hoy le he confesado a mi compañero Miruvore la naturaleza de la empresa que nos atañe y por primera vez ha permanecido callado durante un rato antes de empezar a aventarle trozos de corcho al enano, quien cabe mencionar, no se ha acostumbrado al andar de su corcel. He aquí algo de mi conversación con el elfo:

"Imhaet, debo preguntarte algo... ¿qué estamos buscando?"
- me dijo Miruvore,

"No qué, quiénes. ¿Has oído la leyenda de los Héroes Olvidados?"

"Claro, es como un cuento de hadas que los humanos repiten ¿no? Aunque yo creo que todas esas son invenciones."

"Se equivoca... Es una leyenda, pero es verdadera; y no hay en el continente nación alguna que pueda negar la grandeza de estos guerreros. Y es menester encontrarlos lo antes posible."


"¿En serio? ¿Me estás diciendo que vamos tras los héroes de la Batalla Maldita?"

"En efecto."

"¡Vaya! Pero eso no tiene sentido. ¿Para qué los buscamos si ya están olvidados?"

"..."

"Venga, no es para tanto Imhaet, no hay por qué tomárselo tan a pecho. Pero en serio ¿qué no deberían estar muertos? Digo, ¿Hace cuántos años sucedió? ¿Cien? ¿Ciento cincuenta?"

"Doscientos años mease Miruvore."

"¿Ya ves?, seguro ya ni sus huesos vamos a encontrar."

"Sin embargo, es esa nuestra misión. Verás hay rumores de que se les fue concedida la vida eterna, que se volvieron inmortales y algunos dicen que hasta dioses; y aunque todo esto pueda sonar a disparates, debes recordar que la mayoría de los rumores nacen de una pieza de verdad."

"¿Pero por qué es taaaan importante encontrarlos?, por algo los olvidaron, ¿no?

"El tiempo y los hombres los olvidaron a ellos, pero no sus hazañas. Y la respuesta de porqué es importante encontrarlos se encuentra en lo que conversé con el Rey Loren II ahora que estuvimos en la capital. Te diré lo que le dije a él.

-Mi señor, me temo que he venido ante usted con una gran urgencia y carente de buenas noticias. Como su majestad sabe, mi tierra, la Isla Blanca, es la guardiana de los terribles engendros que azotaron el continente en sus primeros días; y aunque no hubo alma humana ni élfica ni enanil para sustentarlo, ambos sabemos que hablo con la verdad. Sin embargo, hace un mes ya, ocurrió algo insólito, el libro sagrado desapareció de la isla. Este libro contiene registros de todos los entes encerrados en la fosa, así como los rituales que los Icnai utilizaron para encerrarlos bajo siete sellos mágicos.-

- Ya veo, y ¿que desea Mease Imhaet que yo haga?-

- Mi Señor, le imploro decirme la ubicación de los cinco guerreros legendarios, Los Héroes Olvidados.-

Mhm, veo que la situación puede tornarse muy delicada para hacer ese tipo de requisición, sin embargo, por más que quisiera ayudarlo, ni yo mismo lo se. Hace 200 años Mease Imhaet, cuando el continente fue liberado del mal que se cernía sobre gracias a Los Cinco, ellos regresaron a Griffin Fall y fueron venerados como héroes y honrados con los más altos honores, sin embargo, lo único que pidieron a cambio fue que el Rey Blanco se encargara de esconder sus armas y luego decidieron desaparecer. Y así mi antepasado obedeció y nunca más se volvió a oir de ellos. sin embargo, aún cuando muy bien podrían estar muertos a pesar de los rumores, hay todavía un a esperanza, al Oeste, a varios días a caballo, se encuentra el Oráculo de Miracus, tal vez puedas encontrar algo que ilumine tu camino."

"El Rey también organizó un grupo de gente para ir a buscar las armas legendarias a donde sea que el Rey Blanco las haya escondido, así que verás Miruvore, es por eso que vamos al Oeste..."

Icn Imhaet

La capital...

Aun nos falta camino y las luces de la ciudad ya se ven desde lejos, brillan tanto que ocultan las estrellas del cielo nocturno.

Sin embargo ya pueden verse las marcas de una gran capital en las cercanías, las pequeñas casas de agricultores se ven a lo lejos, rodeadas de grandes parcelas. En el horizonte, una línea de fuego en la oscuridad deja ver tan solo un poco la gran muralla que marca los límites de ésta gran ciudad que ha existido durante cientos de años y que ha crecido hasta convertirse en uno de los ejes más importantes del continente. Sobre la serpiente ígnea se ve la silueta del palacio, situado justo en el centro de la ciudad y habitado por uno de los soberanos más poderosos y respetados de todo el continente, no importa la raza.

El rey Loren II tiene el nombre de uno de los monarcas más queridos por los humanos, su antecesor fue quien logró que su reino fuera el más importante y convirtió a Griffin Fall en la capital de los hombres. Sin embargo, su primogénito Gregory, casi destruye todo lo que su padre había construido, pero ahora, doscientos años después, parece que la ciudad nunca haya tenido épocas oscuras. ¿Qué podía esperarse de la única estructura que se mantuvo en pie durante la Guerra Maldita? Ni siquiera el reino de los enanos tuvo tanta suerte.

Volteo y veo que Miruvore y Lorgar duermen pasivamente mientras contemplo la hierba que crece a nuestro alrededor, ésta es la última noche que podré respirar éste aire fresco que viene desde la cascada, ésta es la última noche que podré dormir tranquilo en compañía de la naturaleza como cobija. Esta es una noche sin luna, veo mi armadura, limpia y pulida, lista para presentarme hasta su Majestad y preparada para la ardua empresa que tenemos por delante. Sólo el destino sabe hasta dónde llegaremos.

He decidido explicarle mañana a Miruvore sobre nuestra misión, justo antes de entrar a la ciudad. Creo que se merece saber sobre éste camino por el que andamos antes de mi audiencia con su Majerstad. Me recuestro sobre la hierba y observo las estrellas, ruego a los dioses que nos observan tengan misericordia con nosotros: Mishakal, Paladine, Omehg.

Cierro los ojos.

Icn Imhaet

Una noche en tierra firme...

Pues hemos llegado por fin al pequeño pueblo de Turk, pasaremos la noche aquí, en una pequeña posada a las orillas del Río Quirutess. El barco nos ha dejado y se ha marchado de regreso a la Isla Blanca, mañana nosotros seguiremos nuestro camino después de conseguir algún medio de transporte.

Turk es un pequeño pueblo que ha existido por lo menos desde hace unos quinientos años, sin embargo casi no ha crecido y sus habitantes han mantenido siempre la vida tranquila del campo. El pueblo esta dividido en dos por un río, el Quirutess, y ha mantenido siempre fértil la región.

Se dice que éste fue el lugar de nacimiento de algunos de los Héroes Olvidados, sin embargo nadie lo recuerda ahora y a nadie parece importarle, humanos y elfos los han olvidado por igual. La única esperanza se encuentra al Sureste, a nuestro destino, con el rey Loren.

Icn Imhaet

La Isla Blanca, Vol. II...

Hemos avanzado bien por el Río Quirutess y por ahora el viaje ha continuado tranquilo, asi aprovechare para seguir contando acerca de la Isla Blanca.

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... Elfos, Enanos y Hombres fueron y vinieron por el continente hasta sus más profundos rincones ocupando montañas, valles y bosques. Sólo los Icnai, los primeros seres creados por Omehg, no caminaron más por el mundo, pues después de derrotar hasta la última de las criaturas malignas, se les fue encomendada la tarea de resguardar las puertas mágicas, dos islas cubiertas de símbolos en todos sus pisos y paredes, casas y templos por igual.

Eones pasaron y no había ninguna amenaza en el mundo por lo que los Icnai decidieron ir al contitnente, así construyeron una flota de barcos voladores que los llevaron a tierra firme. Al primer lugar que llegaron le pusieron el nombre de Itsca Moseri, que en su lengua significa Tierra del Continente, y ahí fundaron una ciudad. Con el tiempo, ésta ciudad se convirtió en un centro de comercio que era visistada por toda clase de razas que le dieron el nombre de Ciudad del Puerto.

De ese modo algunas razas se mezclaron. a los Icnai les gustaban las hembras de la raza de los Hombres en particular, y como resultado nacieron los semielfos, con capacidades mágicas como los Icnai, pero no eran inmortales. Sin embargo Omheg no estaba contento, los Icnai habían desobedecido su mandato de vivir en las islas para cuidar al mundo y como castigo los desterró más allá del mar.

Luego contempló Omehg a los semielfos y al darse cuenta que eran una raza fuerte, les pidió que ocuparan el lugar de sus padres desterrados, sin embargo ellos fueron también libres de caminar por el mundo donde habían nacido.

Y es así como ha seguido hasta el día de hoy, los semielfos son los únicos habitantes de las islas mágicas y guardianes de las 7 puertas que cierran la fosa.

FIN


Icn Imhaet
Vocero del Senado de la Isla Blanca
Comandante en Jefe del Ejército de la Runa Dorada

Tierra sobre el horizonte...

Hoy el humor de la tripulación ha mejorado con un grito del vigía a eso del mediodía, se divisó tierra en el horizonte. Poco a poco fueron apareciendo los altos y nevados picos de las Montañas de Obsidiana sobre el mar. También el clima ha mejorado y ya no es necesario llevar los abrigos.

Tan alegre se encontraba la tripulación que decidí anclar a unos cientos de metros de la costa y dejar que se diviertan durante la tarde, han tenido mucha presión y la hemos sobrepasado, creo que un descanso les hará bien.

Mientras tanto les explico a Miruvore y Lorgar que continuaremos nuestro viaje hacia el sur entrando por la desembocadura del Río Quirutess y avanzar a contracorriente hasta el pequeño pueblo de Turk donde dejaremos el barco y seguiremos avanzando sólo nosotros tres hasta llegar a Griffin Fall. Lorgar no estaba muy contento con la idea de montar un caballo, así que veremos que podemos conseguir cuando lleguemos al pueblo.

Icn Imhaet